La Paz, Bolivia (Xinhua).- El presidente boliviano, Luis Arce, dio paso hoy a las operaciones de la segunda fase de la Planta Solar Fotovoltaica, la más grande del país.
“Hoy continuamos con la tarea de cambiar la matriz energética, con energía limpia y alternativa”, afirmó Arce al señalar que para su gobierno es importante inaugurar este proyecto que garantiza la seguridad energética.
La segunda fase de la planta solar, ubicada en la comunidad Ancotanga del departamento de Oruro (oeste) y construida por la empresa TKS Ingeniería y Electricidad SA, inyectará 50 megavatios (MW) al Sistema Interconectado Nacional (SIN).
En total, junto a la fase I que ya está en funcionamiento y genera 50 MW, la planta solar de Ancotanga aporta 100 MW al SIN, lo que representa el 7 por ciento de la demanda de energía eléctrica en el país.
En febrero de 2019, la Empresa Nacional de Electricidad y la empresa TKS Ingeniería y Electricidad SA firmaron el contrato para la construcción de la fase II de la planta solar.
Este proyecto demandó una inversión de 54,7 millones de dólares provenientes del Banco Central de Bolivia, de la Agencia Francesa de Desarrollo y de la Unión Europea.
Por su parte, el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina Ortiz, destacó este miércoles el liderazgo del departamento de Oruro en la generación de energía limpia con la inauguración de la planta.
“Este suelo altiplánico tiene la fuerza suficiente para generar la energía que los bolivianos necesitamos, convirtiendo a Oruro en un departamento generador de electricidad con capacidad de inyectar actualmente 100 MW al sistema interconectado nacional”, afirmó.
Según el ministro, Bolivia tiene un gran potencial en producción de energía limpia, pues cuenta con zonas para la generación de energía solar, eólica, hídrica, geotérmica y biomasa, lo cual favorece la incorporación de tecnología amigable con el medio ambiente.
Dijo que aprovecha los altos niveles de radiación solar del altiplano para la generación de energía, contribuyendo al cambio de la matriz energética del país y a universalizar el acceso al servicio de electricidad.
Bolivia también cuenta con la planta solar en Uyuni, Potosí (suroeste), con 60 MW de potencia y otras de menor capacidad instaladas en Pando (norte), Tarija (sur) y Beni (noreste).
