La Paz, Bolivia (Xinhua).- Con una imparable curva ascendente, Bolivia alcanzó hoy 105.050 casos de la COVID-19 en cinco meses y ocho días desde los primeros contagios confirmados en este país, en medio de la incertidumbre generalizada de los bolivianos que no ven un límite del tope máximo de la pandemia.
El informe nocturno del Ministerio de Salud muestra esta jornada dos registros preocupantes: uno, que el número de contagios diarios sobrepasó los 2.000; este miércoles se reportó 2.031 nuevos confirmados, cifra que se constituye en otro récord.
Hasta este miércoles, de acuerdo al informe oficial, se registraron 4.233 decesos con una letalidad del 4 por ciento y 39.965 personas que vencieron el coronavirus que representa el 38 por ciento del total.
El médico especialista en infectología, Juan Saavedra dijo a un medio local que este promedio de mortandad de la COVID-19 en el país andino amazónico está dentro de los parámetros internacionales.
Sin embargo, dijo que la pregunta es si se pueden comparar las cifras de Bolivia con los números de otros países, “lo que es complicado, ya que en Bolivia se registra decesos extrahospitalarios (domicilios y en la calle), en muchos casos no se reportan”.
El país andino amazónico vive desde el 10 de marzo restricciones parciales por la COVID-19. Una cuarentena desde el domingo 22 de marzo y se radicalizó con un estado de emergencia sanitaria desde el 26 de marzo, con un virtual estado de sitio hasta el 10 de mayo.
A partir del 12 de mayo se incluyó la cuarentena rígida y dinámica que se cumplió hasta el 1 de junio, fecha cuando empezó la cuarentena flexible bajo el control de gobiernos subnacionales y que se amplió esta medida hasta el 31 de agosto.
